Juego de magia fácil con cartas rotas donde los espectadores demuestran sus dotes adivinatorias. Explicado con todo tipo de detalles.
EFECTO
Se rompen 5 naipes. Tras una serie de movimientos decididos por los propios espectadores las medias cartas coinciden para completar las cartas correctamente.
MATERIAL
5 naipes enteros (o bien ya cortados por la mitad)
EJECUCIÓN
Da 5 cartas a un espectador y pídele que las mezcle.
Posteriormente cógelas y comienza a romperlas todas juntas, en bloque, de forma transversal.
Deja que el espectador termine de romperlas. Habremos obtenido dos paquetitos de 5 medias cartas.
Dale un paquetito al espectador y quédate tú con el otro.
Pregúntale cómo prefiere sus cartas, cartas arriba o caras abajo. Decida lo que decida pon tus cartas al contrario de las suyas, de tal forma que habrá unas cartas caras arriba y las otras caras abajo.
Es importante que el espectador no mezcle y proceda exactamente como le indiques.
Dile que las palabras mágicas son “AQUÍ HAY BUENA MAGIA” y que vamos a deletrear las palabras de forma mágica, con las cartas.
Empezamos con “AQUÍ”. La primera letra es “A”, Pregunta al espectador quién empieza el mago o él. Según lo que se decida se cogerá la media carta superior de ese paquete y se pasará debajo diciendo “A”. Ahora la letra “Q”. Pregunta al espectador con qué paquete lo hacemos, según decida cogeremos la media carta superior de ese paquete y la pondremos abajo diciendo “Q”. Se procede igual con la “U”, y con la “I”.
Finalmente se coge la media carta superior de cada paquete y se ponen juntas a un lado de la mesa, sin mostrar la cara oculta.
Haremos lo mismo con la palabra “HAY”. Al final del proceso pondremos nuevamente la media carta superior de cada paquete juntas sobre la mesa.
Procedemos igual con la palabra “BUENA” y luego con “MAGIA”. Los deletreos son interesantes porque los espectadores tienen la posibilidad de decidir siempre de que montón es la media carta que se baja.
Al acabar los deletreos tanto mago como espectador tendrán únicamente una media carta en sus manos. Se voltea la media carta oculta y se comprueba que coinciden, forman la carta completa.
Pausa, que marca el presunto final del juego.
Cuando los aplausos o las muestras de regocijo disminuyen dices: “Lo verdaderamente difícil es que ésta coincidiera, y ésta y ésta…todas”.
Se voltean una a una las medias cartas que están de dorso, se comprueba que también coinciden. ¡Todas y cada una de las cartas!
NOTAS
Éste es un juego automático, matemático, de combinación. Pero con la ventaja de que tiene muy difícil explicación para el público. Siempre se sorprenden. Les sorprenden la primera coincidencia y qué decir del resto.
Realmente la explicación es muy sencilla, pero siempre se le escapa a nuestra mente. Nuestra mente se pierde en deletreos y cartas para arriba y para abajo, y no se da cuenta de la simpleza.
Ambos paquetes están ordenados de igual forma, aunque pasemos cartas de arriba abajo, o de abajo arriba, el orden cíclico se mantendría. Hay un paquete caras arriba, con un orden, y el otro, caras abajo, tiene el mismo orden, pero a la inversa, de forma especular.
Supongamos las que las cartas del paquete A son 1 2 3 4 5, las del paquete B serían 5 4 3 2 1.
Al deletrear “AQUÍ” tendríamos 5 opciones.
Nº | Acciones | Paq.A | Paq.B | A↑ | B↑ |
1 | Pasar 4 cartas del A y 0 del B | 51234 | 54321 | 5 | 5 |
2 | Pasar 3 del A y 1 | 45123 | 43215 | 4 | 4 |
3 | Pasar 2 del A y 2 del B | 34512 | 32154 | 3 | 3 |
4 | Pasar 1 del A y 3 del B | 23451 | 21543 | 2 | 2 |
5 | Pasar 0 del A y 4 del B | 12345 | 15432 | 1 | 1 |
Sea cual sea la opción elegida el resultado es que las cartas coinciden siempre y cuando deletreemos una palabra de 4 letras.
Lo mismo sucederá luego cuando al quedar cuatro cartas deletreemos “HAY”, que es una palabra de 3 letras. Igualmente con el resto de letras. Lo importante es que la primera palabra tenga 4 letras, la segunda 3, la tercera 5 y la última un número impar.
De hecho podríamos cambiar las palabras usadas por cualquiera que os gusten más, o se adapten mejor al público.
Al ser un paquete especular respecto al otro y al mantener el orden cíclico da igual cual sea el paquete que elijamos siempre y cuando pasemos 4 cartas. Pero esto que una vez analizado puede ser bastante obvio se le escapa a la mente.
Nuestras mentes se desbordan con demasiada frecuencia ante problemas que si nos paráramos a analizar, con lápiz en mano, descubriríamos que no son tan difíciles de afrontar. No abandones sin probar, siempre ponte manos a la obra.