EFECTO
Una goma elástica salta mágicamente de los dedos índice y corazón a los dedos anular y meñique.
MATERIAL
Una goma elástica
SECRETO
Coloca la goma entre los dedos índice y corazón de la mano derecha.
Ocultamente, antes de empezar el juego, colocarás la goma sobre las uñas del puño cerrado. Para ello procede como en los dibujos. Estira la goma.
Introduce la punta de los dedos en el hueco creado.
Y suelta la goma, para que la goma descanse en las uñas.
Voltea la mano dorso arriba para que quede como la imagen.
Pregúntale a un espectador en qué dedos está la goma. Haz que sople. Entonces abre la mano y verás como el elástico salta mágicamente a los dedos meñique y anular. ¡MAGIA!
NOTAS
Ésta es la forma en que los niños más pequeños harán el truco de magia. Prepararán la trampa antes de presentarse ante el auditorio. La técnica utilizada es un poquito difícil para los niños muy pequeñitos, no queremos arriesgarnos a que el público vea el procedimiento y se frustren. Ya habrá momento para complicar su magia.
Los niños más grandes podrán presentar el juego preparando la trampa delante del público. Para ello realizarán el estiramiento de la goma tres veces, para condicionar. Es lo que conocemos como finta. De esta manera estamos demostrando con claridad la posición inicial. Preguntaremos: “La goma está en los dedos índice, ¿y?…”
Mientras el espectador piensa y responde “corazón”, aprovecharemos para hacer la trampa, girando inmediatamente la mano dorso arriba. Así hemos conseguido que el movimiento sea invisible para la mente, ya que estaba preocupada en contestar la pregunta. Es lo que los magos conocemos como pregunta obnubilante.
El cerebro cuando está ocupado en pensar, en contestar una pregunta, por muy sencilla que parezca, no piensa con igual intensidad. Es como si los pocos recursos de que dispone se repartieran.
Al principio os hemos mostrado las tres imágenes que resumen el efecto que el público ve.
Par el público sólo existe esto, sólo ha sido importante esto, y sólo recuerdan esto. El resto, la técnica, el secreto, pasa desapercibido.
El mago tiene que convivir con dos realidades, la que todo el público ve, el efecto y la que sólo él sabe, la trampa. Su cuerpo sólo reacciona fisiológicamente a la primera, la otra es totalmente invisible, inexistente, incluso para la mente consciente del mago. Esto sólo se consigue con un gran dominio de la técnica y una puesta actoral que únicamente se centra en el efecto.
Uno de los mayores fallos de los niños para presentar este efecto consiste en no clarificar cuál es la posición inicial. Los nervios les hacen correr demasiado y se olvidan de que la mente de los espectadores no están preparadas para captar todos los datos por muy importantes que nos parezcan.
Suelen pasar de la posición una y dos a la tres demasiado rápido. El público distraído no apreciará que la goma saltó, porque no sabía cómo estaba al principio.
Por eso es importante antes de realizar el salto preguntar al público en qué dedos está la goma, incluso señalando con nuestro dedo índice. Dicho dedo permanece cuando abrimos la mano y procedemos a hacer saltar la goma haciendo muy evidente el cambio de dedos, incluso para las mentes más distraídas.
EJERCICIOS
La enseñanza de la magia nos da opción a proponer la resolución de problemas a nuestros alumnos. No demos todas las respuestas hechas. Dejémosles pensar y crecer.
- Ejercicio 1. Pedir a los niños que hagan que la goma vuelva de los dedos anular y meñique a los dedos índice y corazón.
- Ejercicio 2. Una goma de un color en los dedos índice y corazón, y otra goma de otro color entre los dedos meñique y anular. Conseguir que cambien de lugar.