La facilidad de comprensión del funcionamiento del semáforo para los niños hace que podamos emplear la Técnica del Semáforo como estrategia de aprendizaje para muchas situaciones, tanto en casa como en el colegio.
Esta técnica está especialmente indicada para la enseñanza del Autocontrol de las Emociones Negativas: Ira, Agresividad, Impulsividad, etc.
Este recurso resulta esencial en estos momentos dada la importancia de educar en actitudes de tolerancia, respeto, convivencia… La sociedad está siendo cada vez más consciente de la necesidad de erradicar fenómenos de violencia y bullying en los centros educativos, resultando prioritaria la educación de los aspectos emocionales de la inteligencia.
Pasos para la enseñanza de la Técnica del Semáforo:
Asociar los colores del semáforo con las emociones y la conducta:
- a) ROJO: PARARSE. Cuando no podemos controlar una emoción (sentimos mucha rabia, queremos agredir a alguien, nos ponemos muy nerviosos…) tenemos que pararnos como cuando un coche se encuentra con la luz roja del semáforo.
- b) AMARILLO: PENSAR. Después de detenerse es el momento de pensar y darse cuenta del problema que se está planteando y de lo que se está sintiendo.
- c) VERDE: SOLUCIONARLO. Si uno se da tiempo de pensar pueden surgir alternativas o soluciones al conflicto o problema. Es la hora de elegir la mejor solución.
Para asociar las luces del semáforo con las emociones y la conducta se puede realizar un mural con un semáforo y los siguientes pasos:
- Luz Roja:
1- ALTO, tranquilízate y piensa antes de actuar
- Luz Amarilla:
2- PIENSA soluciones o alternativas y sus consecuencias
- Luz Verde:
3- ADELANTE y pon en práctica la mejor solución